La expareja de Rosana Artigas, la mujer encontrada asesinada el viernes pasado dentro de un tacho sumergido en el río Limay, en Plottier, fue acusada ayer del femicidio y seguirá detenida de manera preventiva por diez meses, informaron fuentes judiciales.
En una audiencia de formulación de cargos realizada este mediodía en la Ciudad Judicial de la capital neuquina, el fiscal jefe Agustín García, junto a la fiscal de la causa, Lucrecia Sola, imputó al sospechoso José Fernández del delito de «homicidio doblemente agravado por haber mantenido una relación de pareja y por haber sido cometido en contexto de violencia de género», en carácter de autor.
Para el fiscal García, el hecho ocurrió el 23 de noviembre, entre las 9.30 y las 10.30, en la casa del imputado, ubicada en un barrio de la ciudad de Plottier, a unos 15 kilómetros de Neuquén Capital.
Según las fuentes judiciales, a Fernández se lo acusó de haber asfixiado a Rosana (46) con un lazo y luego colocar el cadáver en un tambor de 200 litros, en el que intentó prenderlo fuego.
Alrededor de las 10.30, Fernández se fue de su domicilio hacia la zona del expeaje de la ruta 7, donde descartó el teléfono de la víctima y volvió a Plottier.
El fiscal García señaló que, como el acusado no pudo quemar el cuerpo, tapó el recipiente con cemento y otros elementos, lo cargó en su camioneta y cerca de las 13 lo llevó a la zona conocida como el Mangrullo, donde finalmente lo descartó.
Finalmente, García pidió que el hombre permanezca detenido con prisión preventiva por diez meses por considerar que «resulta indispensable por los riesgos que se pretenden cautelar» y que existen los riesgos de entorpecimiento de la investigación y peligro de fuga.
En tanto, las abogadas que representan de familiares de la víctima adhirieron íntegramente al planteo del Ministerio Público Fiscal.
Finalmente, el juez de Garantías que dirigió la audiencia avaló la formulación de cargos, fijó el plazo para concluir la investigación en cuatro meses e hizo lugar al pedido de prisión preventiva requerido por la fiscalía.
Por su parte, Fernández llegó a la audiencia de ayer detenido con prisión como acusado de haber cometido falso testimonio cuando fue entrevistado el 24 de noviembre pasado como testigo, en el marco de la investigación por la desaparición de Rosana.
En esa oportunidad, el sospechoso dijo que la última vez que había visto a su expareja fue el domingo 19 de noviembre, y que el día que ella desapareció, él permaneció en Plottier.
Sin embargo, de acuerdo a la investigación, Fernández, quien estuvo en pareja durante 19 años con Rosana y tienen un hijo en común de 14, recibió un mensaje de texto de la mujer el 23 de noviembre, cerca de las 9.20 y se dirigió en un Chevrolet Corsa hacia la casa de ella cerca de las 9.30, según registros de cámaras de seguridad.
Después de esa hora, una persona los vio llegar al domicilio del hombre en un auto.
Además, la pesquisa detalló que alrededor de las 10.52 el Chevrolet Corsa fue captado en la zona del expeaje de la localidad de Centenario, sobre la ruta provincial 7, y los teléfonos de ambos fueron geolocalizados en esa área.
Cerca de las 11, el vehículo fue captado circulando en sentido contrario, en dirección hacia la ciudad de Neuquén, el teléfono de Rosana se desactivó y no volvió a encenderse.
El cadáver de Rosana fue hallado el viernes a la tarde, dentro de un tacho de combustible de 200 litros, el cual estaba que estaba sumergido en el río Limay, aproximadamente a cinco metros de la costa, en la zona de Los Espigones, cerca del paraje China Muerta.
«El jueves pasado nosotros hicimos una serie de allanamientos y de ahí surgió la información de que el hombre había ido, aproximadamente el martes 21, al domicilio de una expareja de él, donde vive uno de sus hijos, y se había llevado el tacho ese», explicó a Télam el fiscal García.
Además, el fiscal indicó que ese mismo día se obtuvo una filmación de un camino de Los Espigones, cercano del lugar en el que se halló el cuerpo, en el que se observaba un vehículo de Fernández pasar «a gran velocidad».
Dichos registros fueron la clave para que el representante del Ministerio Público ordenara intensificar los rastrillajes en la zona, los cuales derivaron en la localización de los restos de Rosana.
En referencia al hallazgo, el fiscal señaló que cuando retiraron el tanque del agua, dentro de mismo había «un colchón inflable, desinflado, y se alcanzaban a ver los dedos del pie», de una persona.
A partir de ello, el contenedor fue trasladado al laboratorio forense donde se procedió a su apertura y se constató que en su interior estaba el cuerpo de Rosana.
Finalmente, García informó que la autopsia correspondiente determinó que la causa del fallecimiento de Artigas fue «una asfixia mecánica por estrangulamiento que se hizo con un lazo, tanto por las marcas y porque, además, había una cuerda en el cuerpo».
