Neuquén Web habló con Alejandra Rodríguez Carrera, profesora de historia, activista trans sobre la Marcha del Orgullo, expectativas y desafíos frente a los nuevos gobiernos.
Este sábado 2 de diciembre se realizará en Neuquén la XXIII Marcha del Orgullo. La cita será a las 19 horas en el Espacio Graciela Alonso del Parque Central. Hablamos con la activista trans Alejandra Rodríguez Carrera sobre las consignas de la convocatoria, las expectativas en la nueva gestión de Rolando Figueroa en la provincia y el gobierno del libertario Javier Milei.
¿Cuáles son las consignas por las cuales se movilizan este año?
Las consignas de la marcha son bastante parecidas a las del año pasado. Se suma un antecedente que es central en esta marcha, que es basta de los discursos de odio. Justamente a partir de toda una campaña de odio que se hizo durante las elecciones con relación no solamente al colectivo LGBT, sino al feminismo en general y a las políticas de género. Otra de las consignas es pleno acceso al ámbito laboral para todes, basta de binarismo y estereotipos, reformulación de las reglas deportivas, realimentación deportiva, que en muchos casos deja fuera la participación de las personas trans, la ESI con perspectiva no binaria, todo lo que tiene que ver con los crímenes y violencia hacia el colectivo LGBT y fundamentalmente hacia la mujer. Esas son centralmente las consignas.
¿Qué expectativas tienen con la nueva gestión en la provincia?
Cuando un nuevo gobierno asume, lo primero que unx tiene como expectativa es que continúe con las políticas inclusivas, con las políticas públicas de promoción de derechos, con la visibilización de todos los colectivos. Si este gobierno que asume viene con esa impronta y con esa clara posición por supuesto que es bien recibido, al margen de los títulos que le pongamos a los ministerios. Pero al interior de cada cartera tiene que haber posturas claras del respeto a todas las diversidades y fundamentalmente el valor que se le quiere dar a la política pública con relación al género y la diversidad. Más allá de algunos personajes que son parte del espacio del nuevo gobierno, que sabemos que no son justamente afines a estas políticas, esperemos que el gobernador y los ministros y ministras que asuman sí tengan en claro estas posturas que se viene sosteniendo en los últimos. Al margen del cambio de gobierno a nivel nacional queremos que la provincia siga siendo diferente en relación al gobierno de Javier Milei. Además porque la mayoría de las provincias de los distintos entes políticos tienen áreas de género y diversidad, tienen ministras de mujeres o tienen áreas de la mujer. Sería un retroceso que en estos cuatro años no lo hubiera porque los crímenes hacia las mujeres y las diversidades no han disminuido, al contrario siguen en aumento y me parece que la política pública es la que tiene que dar respuesta.
Julieta Corroza adelantó que se iban a respetar las políticas de género
Escuchar eso de parte de alguien que va a ocupar un Ministerio muy importante, nos da mucha expectativa.
¿Qué desafíos tiene el movimiento LGTBIQ+ ante el gobierno de Javier Milei?
No acompañe la candidatura de Javier Milei por lo tanto no tengo buenas expectativas. La verdad que creo que nadie del colectivo LGBT y del movimiento feminista tiene expectativas con alguien que desde el principio planteó no solamente el cierre del ministerio, sino además el recorte a las políticas de género y diversidad, el recorte al Estado y es desde el Estado que se tienen que formular estas políticas públicas. Sin embargo, eso no quita que las exigencias sean las mismas con relación no solo a este gobierno que deja. Hay un gran problema que tenemos como sociedad argentina. Hay que resolver de fondo el problema de las violencias y las desigualdades de género y que no se resuelven quizás con un ministerio más o menos. Me parece que hay que hacer cambios sociales profundos. Yo como docente particularmente creo que la Educación Sexual Integral es la base para que las infancias y la adolescencia y la juventud crezcan en otros ámbitos y con otras mentalidades, bajo otros paradigmas. Todas las violencias que vemos reflejadas en los altos índices de violencia de género tienen que ver con eso, con los sentidos que se le dan a las relaciones y a los vínculos sexo afectivos. Creo que si en las escuelas, en las familias, en la sociedad en general no discutimos esto y no hacemos nada para cambiarlo de raíz y por el contrario si vemos como peligroso que exista la Educación Sexual Integral, estamos en un retroceso fundamentalmente.
¿Cuáles son las deudas pendientes de los gobiernos anteriores con el colectivo?
Las deudas pendientes con el colectivo son la Educación Sexual Integral con presupuesto, con mayores programas que acompañen la formación de docentes. Hay muchos docentes que aún se resisten a trabajar la ESI, en una sociedad donde tenemos una ley que acompaña la formación de docentes y la instrucción de niños, niñas o de adolescentes en toda su formación. Creo que eso es muy importante, además porque todavía en las currículas universitarias no se dicta o en muy pocos casos. Ha habido reformas en la provincia a nivel curricular en el nivel secundario y en los institutos de formación docente pero nuestros profesionales siguen formándose sin esa perspectiva.
¿Por qué la convocatoria dice que la deuda sigue siendo con nosotrxs?
La deuda tiene que ver con que hay muchas compañeras trans que se mueren sin tener un trabajo formal y que mueren producto del abandono del Estado en relación a la salud. Ni quiero pensar ahora con este gobierno que asume cuál va a ser la postura con relación, por ejemplo, a los tratamientos de VIH, de enfermedades de transmisión sexual, de tuberculosis, que hay muchas compañeras y compañeros del colectivo que sufren esta enfermedad y de otros colectivos también. Muchas personas heterosexuales son portadoras de VIH y no lo sabe. Por eso, el Estado tiene que estar al frente de esas campañas de concientización, por eso la educación sexual es tan importante porque tiene que ver con el cuidado del cuerpo, con el cuidado del otro y de la otra y claramente hay que asumir que existen poblaciones muy vulnerables en la Argentina, que la pobreza golpea de otra manera y que obviamente que la falta de trabajo impacta.