Un nuevo informe de la consultora de Gustavo Córdoba y Ana Paola Zuban pone en evidencia el creciente descontento con la gestión del presidente Javier Milei. La encuesta reveló que las decisiones del mandatario están lejos de satisfacer a la mayoría de los argentinos.
Uno de los puntos más controvertidos es la política exterior. Según el informe, las tensiones con países clave como España, China, Brasil y México han generado preocupación. «El 93.7% de los encuestados consideró que Brasil es el socio comercial más importante, y los conflictos diplomáticos actuales ponen en riesgo esta relación esencial», destaca el documento. Asimismo, las relaciones con Estados Unidos e Israel, promovidas por el presidentes, son consideradas irrelevantes por el 52.9% y el 59.3% de los argentinos, respectivamente.
El desinterés de Javier Milei en la cuestión de las Islas Malvinas es otro tema caliente. Mientras que el 91% de los argentinos cree en la necesidad de seguir reclamando la soberanía sobre las islas, solo el 57% piensa que el presidente le da prioridad a este asunto. Más alarmante aún, «el 55.2% de los encuestados considera que la postura del gobierno es demasiado favorable hacia Inglaterra», una percepción que socava la confianza en la política de defensa nacional de Milei.
En el ámbito económico, los datos son igualmente desalentadores. «El 74% de los encuestados opina que el ajuste lo estamos pagando todos«, lo que refleja una profunda insatisfacción con las medidas económicas del gobierno. Además, «el 65% no cree que los salarios estén ganándole a la inflación», lo cual se traduce en una realidad donde el 41% de la población apenas llega a fin de mes, mientras que otro 41% ni siquiera lo consigue. Estos números subrayan la brecha entre las promesas de campaña y la realidad que enfrenta el ciudadano común.
A pesar de estos problemas, la aprobación de Milei se mantiene en un 46.6%, una cifra que muestra una división clara en la opinión pública. Los sentimientos predominantes entre los ciudadanos son de esperanza (29.3%), pero también de tristeza (22.3%) y vergüenza (20.7%). «Este balance emocional mixto refleja la tensión constante que define el actual estado del país bajo la administración de Milei», concluye el informe.
La administración de Javier Milei se enfrenta a un desafío crucial: ajustar su rumbo para responder a las expectativas de sus ciudadanos o continuar sumergida en una vorágine de conflictos y promesas incumplidas, utilizando las fuerzas represivas para hacer pasar el ajuste brutal. Con una oposición fragmentada y sin liderazgos emergentes claros, el futuro político de Argentina es incierto. Los próximos meses serán decisivos para determinar si el presidente puede recuperar la confianza de su electorado o si el descontento continuará creciendo.
