Neuquén Web abre un espacio para la reflexión de lectores y lectoras. Compartimos palabras de Rodolfo «Toto» Manson, ex concejal de San Martín de los Andes sobre el 24 de marzo.
Hace veinte años Néstor Kirchner bajó los cuadros.
Y puso en su lugar a la dictadura vendepatria.
Y la bajó de una con coraje. Con altura. Con dignidad.
Cómo se debe enfrentar a los cobardes.
La dictadura asesina y vendepatria era eso. Unas fuerzas armadas serviles y traidoras
puestas al servicio de los intereses oligárquicos y del imperialismo.
Sin vueltas, sin rebusques: el saqueo de la Argentina, la destrucción de su industria y la
explotación de su clase trabajadora. El objetivo de terminar con el proyecto de una Patria
Justa, Libre y Soberana.
Usando los fierros, las picanas, los falcon y los aviones, con la impunidad del control del
estado y la complicidad de los diarios para entregar la Patria en bandeja a la voracidad de
los saqueadores y de los explotadores.
Cobardes, torturadores de capucha, ladrones de bebés, crucificadores de misa dominguera.
Y así y todo, viento en contra, se fue plantando nuestro Pueblo.
En miles de Hebes. En miles de Saúles. Poniéndose de pie frente a los que fusilaban,
cavaban tumbas sin nombres y arrojaban gente desde los aviones.
Esos mismos que improvisaron Malvinas, que se rindieron sin tirar, que mandaron al frente
a los pibes, y se entregaron bien rasuraditos.
Será tiempo de plantarse simple y claro. Cómo Néstor hace veinte años.
Sin palmaditas, ni franelas, ni discursitos progresistas.
Las cosas se cuentan solas, decía el cantor.
Y no nos va a correr la oligarquía, disfrazada ahora con careta de loquito. Quiere lo de
siempre.
Y habrá que enfrentarla sin vueltas, con claridad, con firmeza.
Como Saúl con la campera y el parlante, cómo Hebe con los miles de pañuelos, los
blancos, los de siempre. Cómo los pibes de Malvinas, sin usar su santo nombre en vano.
Y volver. Para hacer una democracia de verdad, que rompa y cambie la Historia. Que se
defiende haciendo que valga la pena, consagrada al objetivo de un Pueblo Feliz en una
Argentina Grande.
Una Argentina Justa, Libre y Soberana. Para los postergados y las postergadas. Para los
que están naciendo.
Que la disfruten, que la vivan.
Que para eso las nuestras dejaron jirones de sus vidas.
Para llevar su nombre a la Victoria.
Y entonces cumplir con nuestro deber de Pueblo
