Con fondos de la Provincia de Neuquén, este sábado se inauguró el puente sobre el Arroyo Durán. Es una obra fundamental para la conectividad en ese sector de la ciudad. Neuquén habló luego del acto que protagonizaron el gobernador Rolando Figueroa y Mariano Gaido con el presidente de la comisión vecinal del barrio Río Grande.
Finalmente se inauguró el puente sobre el arroyo Durán
La verdad, muy contentos. La verdad, una felicidad muy grande porque se concretó una obra que venía paralizada y que venía con un atraso casi de un año. El cambio de gobierno provincial nos dio los recursos que faltaban. Así que hay que agradecer también a la gente de provincia, al gobernador, a la gente de recursos hídricos, a UPEFE, que consiguieron los fondos para terminar una obra que estaba sin fondos y totalmente paralizada.
¿Complicaba la vida diaria de los vecinos?
El barrio podemos decir que vuelve a la normalidad que teníamos hace un año y medio, sobre todo el tema de la circulación. Poder llegar temprano a los lugares, poder ir a visitar a las madres o a los familiares y no tener que dar toda una vuelta gigante. Por una cuestión también de emergencias. Tienen más accesibilidad hoy las ambulancias del sistema del Sien que vienen de la ciudad Deportiva. Y además, como siempre lo planteo, es una arteria de emergencia hídrica. Nosotros vivimos casi en una isla. Estamos rodeados por el Arroyo Durán y tenemos el río Limay. Entonces, es una zona de emergencia hídrica. Y bueno, la salida y el escape de emergencia es justamente este puente. Así que bien, muy contentos que se terminó la obra.
Son varios barrios los que utilizan este puente
Sí, Don Bosco II, Barrio Limay, Altos del Limay, Río Grande. También los chicos de Belgrano, dan la vuelta por acá cuando está muy congestionado el otro lado, porque es mucho más rápido. Paseo Costero y calle Democracia y cruzas la isla. Es una vía muy importante de circulación, sobre todo para el sur. Y sobre todo los que tenemos el Arroyo Durán, porque entre puente y puente son muchas las distancias.
Cuando salían a la escuela o al trabajo, perdían unos minutos
Sí, porque las filas se hacen eternas. Por ejemplo, en la calle Gatica llegamos sobre todo en verano. Somos un barrio que recibimos aproximadamente 50.000 personas por día en época de verano. Y esto nos colapsaba el resto de los lugares, avenida Olascoaga, calle Pampa, Río Negro. Y bueno, sin ir más lejos, Gatica llegamos a tener 600 metros de cola en época de verano para cruzar el puente. Así que sí, la verdad que era una obra necesaria. Que era una obra que había que hacerla, porque lo que teníamos, y hay que decirlo, no era un puente. Eran dos caños que tenían hormigón arriba. El agua no escurría, que era un gran problema que teníamos también. El arroyo del puente hacia arriba, en las inundaciones o cuando había mucha lluvia, que no escurría bien el agua, no erogaba. Entonces, se inundaba parte del barrio también. Así que bueno, esperemos que ahora este puente nos solucione también ese problema.
