La Junta Interna del EPAS informó que se trata de 60 los trabajadores y trabajadoras que fueron desvinculados del organismo.
Los delegados y delegadas del Ente Provincial de Agua y Saneamiento de Neuquén informaron que hay alrededor de 60 trabajadores y trabajadoras que fueron despedidos del organismo. “Se trata de compañeros y compañeras que revisten bajo figuras irregulares, pero la realidad es que vienen prestando servicios necesarios para el funcionamiento de nuestro organismo de manera habitual y permanente”, explicaron.
Inmediatamente se declararon en estado de alerta y movilización y se reunieron con el recientemente nombrado secretario de empresas públicas, Luis Lazcano. “Le planteamos la situación de acefalía total que sufrimos en el EPAS y le manifestamos la necesidad de continuidad laboral de este grupo de trabajadores”.
El día martes continuarán en asamblea a partir de las 9 horas.