El representante en Neuquén de la Federación de Conductores de Taxis, Fabián Palazzo, se refirió al debate en el Concejo Deliberante sobre la habilitación de UBER en la ciudad. Aseguró que los concejales argumentan que el servicio de taxis es deficiente, pero recordó que “desde hace más de diez años no se entregan nuevas licencias”.
Señaló que desde el sector se oponen a “la inseguridad que generan estas aplicaciones” y denunció el destrato y las exigencias que deben cumplir los taxistas, como “la regulación vigente en aspectos como seguridad, tarifas, calidad del servicio, estado de las unidades y hasta la pintura de los vehículos”.
Palazzo también cuestionó cómo se pagarán los créditos otorgados el año pasado por el intendente y el gobernador para renovar la flota. Indicó que se adquirieron 70 vehículos y advirtió: “Si baja el trabajo, ¿cómo se van a pagar esos autos?”.
Reconoció que algunos choferes ya están usando la aplicación UBER, y aunque aclaró que no los justifica, expresó: “Entiendo que los muchachos necesitan llevar un mango más a la casa. Hoy, con 30 mil pesos por día, no le alcanza a nadie para vivir”.
Por último, sostuvo que hace tiempo no se registran hechos de violencia entre taxistas y conductores de UBER, aunque reconoció que en su momento “la violencia era de ambas partes”.
– ¿Cuál es la posición de los taxistas respecto de la habilitación de UBER en la ciudad?
– Nosotros venimos trabajando distintas situaciones, haciendo gestiones y tratando de acercarnos, en lo posible, a la ciudadanía, que es quien reclama mayor servicio. Entendemos que son injustificadas las acciones que algunos bloques del Concejo Deliberante, como el de La Libertad, están proponiendo, argumentando que el servicio es deficiente. Pero acá hay un problema de larga data. Desde hace más de diez años no se entregan nuevas licencias de taxi. En una ciudad que, según el intendente y el propio gobernador, crece más del 40%, nos parece totalmente irrisoria la posición que tienen. La solución sería sencilla: habilitar nuevas licencias.
– ¿Ustedes siguen oponiéndose a que Uber funcione en la ciudad?
– Nosotros nos oponemos a la inseguridad que generan estas aplicaciones, y al destrato en cuanto a la regulación vigente en aspectos como seguridad, tarifas, calidad del servicio, estado de las unidades y hasta la pintura de los vehículos. Son muchas las diferencias.
– ¿Consideran que es una competencia desleal?
– Para nosotros es totalmente desleal, y no solo por parte de estas aplicaciones, sino también por parte del Poder Ejecutivo Municipal, que responde políticamente al gobernador. En octubre nos ofrecieron la posibilidad de acceder a créditos, y al día de hoy, en toda la provincia, hay 70 créditos entregados, es decir, 70 coches nuevos. ¿Y con qué se van a pagar esos autos?
– ¿Qué opina sobre que algunos choferes de taxis ya estén utilizando la aplicación Uber en Neuquén?
– Mirá, no puedo hacerme el tonto con esto, y también tengo que marcar la realidad. Lo dijeron recientemente los compañeros de la mesa de la CGT: hay hambre en el país, y Neuquén no es la excepción. Nuestro sector tampoco escapa a eso. No lo justifico, pero entiendo que los muchachos necesitan llevar un mango más a la casa. Hoy, con 30 mil pesos por día, no le alcanza a nadie para vivir.
– Se han dado situaciones de violencia entre taxistas y conductores de Uber. ¿Eso va a seguir ocurriendo?
– Eso dejó de pasar hace bastante tiempo. También es cierto que fui parte y testigo de algunas situaciones. Dos veces me atropellaron, una tengo un principio de fractura en un brazo. En otra, en el estacionamiento del Jumbo, no me pasó por arriba porque los compañeros me sacaron del medio. Era una violencia que se generaba de ambas partes. Esa gente cuidaba su vehículo, y nosotros, nuestra fuente de trabajo y nuestras familias.
