El gobernador Rolando Figueroa intercedió en la negociación para que los trabajadores petroleros no sean alcanzados por el nuevo impuesto a las guanacias. Las gestiones las realizó junto al titular del gremio petrolero, Marcelo Rucci.
El mandatario neuquino, a través de funcionarios del gobierno nacional, trabajó en la modificación del artículo que influye sobre el salario de los trabajadores petroleros. Según trascendió de fuentes provinciales, gestiona acciones que benefician a miles de trabajadores petroleros, recientemente afectados por la restitución de la cuarta categoría del impuesto a las ganancias.
Las tareas, en coordinación permanente con el secretario general del Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa Marcelo Rucci, promueven beneficios para la planta trabajadora del sector hidrocarburífero.
La reversión del impuesto a las ganancias obliga a tributar a empleados con un sueldo bruto de $1.800.000 (en el caso de que sean solteros) y $2.300.000 si están casados.